MUERTE DE ANÍBAL
En el año 189 a. C. Antíoco es vencido por Roma, y Aníbal, que le había servido como general y asesor, huye. Tras deambular buscando refugio es acogido en la corte de Prusias, rey de Bitinia. Habían pasado los años y Roma estaba al tanto, pero ya no lo consideraban su mayor enemigo, más bien alguien a quien la fortuna había abandonado, que sumado a la debilidad proporcionada por la vejez, había llevado a ser casi ignorado. Pero un ambicioso político y militar llamado Tito Flaminino (228-174 a.C.), llega como embajador ante Prusias, y al saber del general cartaginés encuentra una gran oportunidad para ganar fama y reconocimiento, y exige su entrega inmediata.
El rey de Bitinia, a pesar de sus suplicas e insistentes ruegos, acaba cediendo a la petición de Flaminino, y rompiendo los compromisos de hospitalidad envía la guardia al domicilio de su huésped. El general cartaginés, conocía desde un primer momento la debilidad de Prusias y había tomado precauciones desde hacía tiempo. Tenía la vivienda perforada con siete salidas subterráneas orientadas en distintas direcciones. Todas ellas creía secretas, pero al intentar escapar se dio cuenta que estaba equivocado y que el poder de los reyes no permitía ocultar nada. Hasta la puerta más escondida había acabado siendo custodiada por los guardias.
Comprobando que la vivienda estaba fuertemente acordonada y todas las salidas subterráneas vigiladas tomó la fatal decisión que desde hacía tiempo le rondaba. Con determinación pidió el veneno que lo acompañaba a todas partes en caso de emergencia y clamó:
"Pongamos fin a la gran preocupación de los romanos, que consideran largo y pesado esperar la muerte de un anciano odiado". TITO LIVIO, Historia de Roma, Libro XXXIX, 51, 9.
Tras maldecir a las gentes y al reino de Prusias requirió la presencia de los dioses de la hospitalidad para que fueran testigos del agravio a sus preceptos. Sujetó la copa y la unió a sus labios hasta consumir el líquido que consumiría su vida, la del hombre más temido en la historia de Roma.
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Muerte de Anibal en los Textos Clásicos:
- PLUTARCO, Vidas Paralelas, Tito Flaminino, 20, 8-14.
- TITO LIVIO, Historia de Roma, Libro XXXIX, 51, 1-16.
Nota: Basado en los textos clásicos.
Fecha creación: 19/08/19 - Última modificación: 20/08/19
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